Aquí tienes algunos consejos brillantes para tener una Navidad más verde y sostenible. Adoptar prácticas sostenibles en Navidad no es tan difícil como podría parecer. De hecho, con un poco de reflexión y esfuerzo, ¡es realmente simple y puede ser muy divertido!
Aquí tienes algunos consejos e ideas sobre cómo ser más sostenible esta Navidad y no te pierdas estos dibujos para pintar de Navidad en el blog.
Consejos para una Navidad más verde y sostenible
Decoraciones navideñas caseras
Las decoraciones tradicionales suelen estar hechas de plástico y purpurina, y a menudo se desechan después de la temporada festiva, generando más residuos. Puedes crear tus propias decoraciones y hacer que toda la familia participe.
Cada vez más, la gente está haciendo decoraciones con elementos naturales, como piñas, acebo, conchas marinas, y a los niños les encanta ser creativos con cosas así. Incluso puedes nombrar las decoraciones con los nombres de los niños para que las reutilicen cada año.
Puedes utilizar telas sostenibles como algodón, seda y cáñamo para hacer lazos y dar color a tus decoraciones. Hay muchas ideas en línea sobre cómo hacer tus propias guirnaldas y bolas de cartón, hilos y un poco de color.
Haz tu propia corona
Deleita a tus vecinos con una corona hecha en casa colgada en tu puerta principal. Puedes hacerla con cualquier cosa que recojas del exterior, ramas, follaje, bayas y hojas, y añadir algunas frutas secas sobrantes de la preparación del pastel de Navidad. Puedes empezar con un gancho de ropa de tu armario y seguir desde ahí.
Velas navideñas
Las velas son un elemento encantador durante la temporada festiva. Opta por aquellas hechas de cera natural, son mejores para ti y más sostenibles.
Luces LED
Las luces son una parte fundamental de la Navidad, ¿a quién no le gusta ver árboles iluminados o vecindarios enteros compitiendo entre sí? Elegir luces LED es una opción ecológica, ya que son mucho más eficientes que las luces tradicionales, a menudo utilizando menos del 1% de la energía necesaria en las luces tradicionales. Pueden ser más caras, pero esto se amortizará a largo plazo, ya que son mucho más duraderas.
Tarjetas de Navidad
Enviar tarjetas de Navidad es una parte tradicional y encantadora de la Navidad. Aunque puedes enviar tarjetas electrónicas, no es lo mismo que escuchar el sonido de un montón de tarjetas cayendo en el buzón. Simplemente asegúrate de que las tarjetas que compres sean reciclables y respetuosas con el medio ambiente, y recicla cualquier tarjeta que recibas después de Navidad.
Una gran sugerencia es dárselas a los niños para que practiquen sus manualidades. También puedes usarlas como postales o incluso cortarlas para usarlas como etiquetas de regalo.
Envolver tus regalos
Ya conoces esa pila de papel de regalo que aparece muy rápidamente cada mañana de Navidad. Imagina cuánto de ello se desperdicia o no es reciclable. Puedes usar papel marrón para envolver regalos, atándolo todo con cuerda; puedes envolver con tela, o incluso con calendarios y revistas antiguas. Mejor aún, inicia la tradición de guardar bolsas de regalo, cajas y lazos de cualquier regalo de este año y reutilízalos.
Y si estás comprando papel de regalo, trata de elegir papel que no tenga lámina ni purpurina, ya que ese tipo de papel no se puede reciclar.
Reutiliza esas bolsas de compras
Esto se ha vuelto normal en nuestras compras de comestibles y a veces ni siquiera lo pensamos, lo cual es genial. Puede parecer obvio, pero aplica el mismo enfoque al hacer tus compras navideñas y lleva contigo tus bolsas de compras reutilizables en todo momento.
Compra local
En estos tiempos, comprar localmente se ha vuelto aún más importante; al hacerlo, estarás reduciendo tu huella de carbono y manteniendo tu dinero en la economía local, ¡lo cual es bueno!
Reduce el desperdicio de alimentos
Consumimos mucha comida en Navidad, pero a veces compramos en exceso y eso lleva al desperdicio. Si tienes excedentes de comida, ponte en contacto con bancos de alimentos locales o organizaciones benéficas antes de intentar desecharla. Y al hacer tu lista de alimentos, haz lo que hace Santa y revísala dos veces antes de decidir lo que realmente necesitas. Alternativamente, si te quedan verduras sobrantes, considera hacer una sopa que puedas congelar y disfrutar en una fría noche de invierno después de Navidad.
Reciclaje del árbol de Navidad
No queremos pensar en lo que sucede después de Navidad, así que hemos dejado esto para más adelante en la lista, pero cuando llegue el momento, si tienes un árbol real, llévalo a uno de los centros de reciclaje de árboles de tu autoridad local, donde se reciclará de forma gratuita. Solo verifica los horarios y fechas en enero. Si tienes un árbol artificial y no eres de los que lo dejan puesto todo el año, ¡empáquelo de manera segura para la próxima Navidad!